Wolfspeed dijo el domingo que ha llegado a un acuerdo de reestructuración con los acreedores y planea declararse en quiebra en Estados Unidos en un futuro próximo.
El acuerdo de reestructuración proporcionaría al fabricante de chips en dificultades 275 millones de dólares en financiación nueva por parte de algunos de sus acreedores existentes, dijo la compañía en un comunicado.
Wolfspeed dijo que planea buscar la aprobación de su plan preempaquetado y posteriormente salir de la bancarrota hacia el final del tercer trimestre del año calendario 2025.
La compañía tiene alrededor de 1.300 millones de dólares en efectivo al tercer trimestre del año financiero 2025 para continuar con las operaciones regulares en el corto plazo, dijo, y agregó que la reestructuración la ayudaría a reducir la deuda existente en alrededor de 4.600 millones de dólares.
En una quiebra preparada, las empresas y sus acreedores acuerdan un plan de reorganización antes de la presentación de la quiebra y los acreedores incluso votan sobre el plan.
El fabricante de chips planteó dudas sobre su continuidad en mayo, ya que la profundización de la incertidumbre económica derivada de las cambiantes políticas comerciales estadounidenses, combinada con un debilitamiento de la demanda, desencadenó una serie de desafíos financieros.
